Editorial En Mayo todos los olivos mediterráneos entran en floración, anuncio de cosecha como la que están ahora recogiendo en el hemisferio sur, metidos en recolección. En España ya no nos acordamos de aquellas variedades de olivo que se plantaban intercaladas para producir más polen y mejorar el cuajado, algo que suena a tiempos pasados. Llama la atención en ese sentido, que somos casi el único país que cultiva olivos donde la polinización no tiene ninguna importancia, la damos por hecha, hay polen suficiente como también hay olivos de sobra. Seguramente la mayor parte de las variedades de olivo son autoincompatibles, es decir, que su polen sólo fecunda las flores de otra variedad o en muy baja medida a sí mismos u otros de las misma variedad. Pero eso aquí importa poco, la cosecha es función de las lluvias, y este año vienen sumándose. Por cierto que el Norte de Africa trae una primavera de elevadas precipitaciones, países como Túnez o Marruecos hace tiempo no han visto llover tanto en este periodo, Todo esto supondrá una alta producción de aceite esta campaña. Aviso para el Hemisferio Sur, por si pensábais vender aceite en Europa. Hasta pronto.
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